Ayer, hoy y mañana. El Espíritu Santo obra poderosamente y puede consolar en toda aflicción y necesidad. Lo hizo presente el Apóstol Mayor en el Servicio Divino de Pentecostés que fue transmitido a todo el mundo.

30.000 jóvenes creyentes se reunieron el domingo por la mañana para el cierre y punto culminante del Día de la Juventud Internacional: el Servicio Divino en la arena. En la prédica, el Apóstol Mayor Schneider hizo recordar a los oyentes el omnipresente amor de Dios, que ellos deben hacer experimentar en la comunión.

Festejar con sinceridad la Santa Cena podría solucionar problemas, sostuvo el Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider en su Servicio Divino de Colonia/Uruguay. La Santa Cena es más –mucho más– que una rutina litúrgica.

En los 100 años que transcurrieron después de su introducción general, la hostia combinada casi no ha sufrido cambios. Sin embargo, en ese periodo donde sí hubo modificaciones fue en la interpretación de la Santa Cena de la Iglesia Nueva Apostólica. En el centro de dichos cambios está la relación con el perdón de los pecados.

La fe cristiana hace sentirnos seguros y serenos. Pero el Evangelio también deja claro que hay tareas que los creyentes deben realizar. Los Servicios Divinos dominicales de mayo describen esta interacción.

¿Cuándo ayuda Jesús? ¿Para qué sirve el Evangelio? ¿Qué producen las buenas obras? Hay muchas ideas al respecto y algunas son equivocadas. El Apóstol Mayor Jean-Luc Schneider aclara lo esencial.

La mujer tiene puesto un metal en su dedo. El siervo autorizado habla. Y en la mano ella lleva –sí, ¿qué lleva? ¿Una joya? ¿Un anillo de bodas? ¿Y qué tiene esto que ver con la hostia de la Santa Cena?

Jesús entra en Jerusalén montado sobre una asna. Algo inaudito para muchos de los presentes, pues se lo esperaba como el Mesías y había sido anunciado como un rey. ¡Y ahora eso! Al término de la semana se dará muerte a Jesucristo.

La reforma en la interpretación de ministerio, ¿por qué es necesaria? ¿Qué implicaciones tendrá? ¿Y cómo funcionará? El video con la alocución del Apóstol Mayor brinda las respuestas. Una síntesis de lo más importante.

El tiempo de ayuno previo a la Pascua se acerca a su punto culminante. La semana de la pasión concluye con el pensamiento triunfal de la resurrección de Jesús. Pero primero está la cruz.

¿Pan y vino en uno? ¿Gotas en lugar de una copa? ¿Seguirá estando en orden así? La forma de la Santa Cena en la Iglesia Nueva Apostólica plantea preguntas. Las respuestas se encuentran echando una mirada a sus 2000 años de desarrollo.

Es bastante más alto que el cáliz de la Santa Cena, en su parte exterior tiene un delicado grabado todo alrededor y ... no está en cada Servicio Divino sobre el altar. Es el cáliz bautismal que acaba de introducir la Iglesia Nueva Apostólica EE. UU.

¿El primer deber del fotógrafo? ¡Hablar! Y más exactamente mucho antes de pulsar el disparador en el Servicio Divino. La coordinación ayuda a todos los involucrados y abre nuevas posibilidades. Qué hay que tener en cuenta.

El mes de marzo tiene para ofrecernos cinco Servicios Divinos dominicales que sintetizan todo el núcleo del ser cristiano, desde la elección hasta el retorno de Jesús.

Pan y vino en uno. Este es hace 100 años el estándar de la Santa Cena en la Iglesia Nueva Apostólica. Y esto tiene su historia previa: dos problemas, tres soluciones y un ejemplo.

Del Caribe, pasando por España, hasta el Mar Negro. Muchos hermosos lugares turísticos formaban parte del campo de actividad que el Apóstol de Distrito e.d. Markus Fehlbaum (Suiza) cultivó por diez años. En la entrevista permite echar un vistazo a su trabajo.

¿Mantener la esperanza? ¿Aunque la noche sea tan oscura y la mañana esté tan lejos? ¿Cómo hacer? Dos demostraron que se puede y experimentaron su cumplimiento. De ambos se puede aprender mucho.

Las imágenes narran historias y las fotos responden preguntas. Lo decisivo es oprimir el disparador en el instante apropiado. ¿Y qué tiene que estar en el foco en el Servicio Divino? Una síntesis de motivos y posibilidades.